Oish, oish, oish.. .que stress pre-vacacional tengo en to lo arto...
Estoy deseando que den las dos y no entiendo por qué hoy pasan tan lentos los segundos... debe ser por el tráfico de la Operación Salida. Seguro que hay atascos hasta en el interior del reloj: ya me imagino yo a todos los segundos atascados en caravana dentro de mi reloj de cuerda floja, tocando el claxon de su coche cargado hasta más no poder: Don Segundo al volante; a la diestra, de copiloto y con el mapa de carreteras del año pasado, su mujer Centésima (de Segundo). En el asiento de atrás, armando jaleo los críos: la hija mayor, Décima; el Minuto, al que ya le empiezan salir los pelillos del bigote; y el pequeño Milisegundo, una copia fiel de su padre, con el chupe colgando del cuello y sentado sobre el regazo de la suegra, Dña. Hora Menos Encanarias. El maletero lleno de utensilios y enseres para pasar el verano: manecillas de varios modelos de reloj ya en desuso, metrónomos para practicar compases, varios álbumes con fotos de tiempos pasados que siempre gustan de ser recordados en las calurosas siestas estivales, y un cargamento de buenos deseos a la espera de ser utilizados en alguna noche de agosto con alguna de esas bellas estrellas fugaces que sólo duran el tiempo justo para enamorarse de ellas.
¡Felices vacaciones a todos!
Ya empiezan a retumbar en mi cabeza los ecos de las verbenas de los pueblos:
La barbacooaaa,
la barbacoooaaaa,
la barbacooaaaa,
le barbecue.
El chringuito,
el chiringuito,
el chiringuito...
Ufff... que poeta el Georgi Dann...
Goytisolo a su lao es un mindundi.
¡¡Lo dicho, que el titi se va a hacer el Agosto!!
¡Mucho bueno para todos!
viernes, 3 de agosto de 2007
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